La mayoría de las personas no saben a qué lugares acudir cuando tienen una persona en su núcleo familiar con alguna discapacidad. La forma cómo solicitar ayudas económicas para personas con discapacidad es algo que debe estar al alcance de todos aquellos que lo requieran.
En toda sociedad existen diferentes planes de ayuda a personas con discapacidad, que permitan su inclusión y acceso a las distintas subvenciones que otorga el Estado y las instituciones privadas que se encargan de prestar este servicio.
Los beneficios que se otorgan en las ayudas por discapacidad van clasificados de la siguiente manera:
Existe un baremo para solicitar la ayuda económica para personas con discapacidad, en el cual se deberá demostrar el grado de dependencia que se tiene con la persona que está a su cargo, por lo general, es una relación filial de madre-hijo y el tipo de discapacidad que posee.
Principalmente, existen 3 grados de dependencia:
El grado de discapacidad se mide de acuerdo al tipo de limitación física, mental, motora o sensorial, y debe ser determinado por una junta médica; la cual después de realizar la evaluación médica correspondiente y conforme a la Escala de Barthel, logra determinar el nivel de independencia que tiene una persona en relación a las actividades cotidianas diarias.
Estas actividades pueden estar determinadas por el comer, trasladarse de un lugar a otro y realizar necesidades básicas como ir al baño y el aseo personal.
Este índice o Escala de Barthel, es un modelo muy completo de evaluación integral, cuya finalidad principal es establecer el grado de discapacidad de una persona, lo cual permitirá al médico tratante emitir el certificado de discapacidad; el cual deberá ser presentado al momento de realizar las gestiones de todas las ayudas que existen para las personas con discapacidad.
En el país ibérico existe una población notoria que presenta problemas de discapacidad, de acuerdo a una investigación, casi el 15% de la población en España está fuera del campo laboral por algún tipo de discapacidad, las cuales en su mayoría se sienten excluidas e inválidas en la sociedad.
Es una situación muy alarmante que ha estudiado con mucho detenimiento el Observatorio Estatal de la Discapacidad (OED), quien afirma que más de medio millón de españoles con discapacidad están en riesgo de pobreza extrema, siendo la mitad de estos habitantes personas con edad para estar dentro del campo laboral.
El porcentaje de personas con discapacidad según el género, varía mucho en España, las mujeres, por su parte, son un 40% en relación al 65% de los hombres, muchos de ellos adquirieron esta condición debido algún accidente laboral que los inhabilitó para continuar con su rutina diaria.
La discapacidad en España ha incrementado considerablemente el desempleo, con una tasa promedio de 3,53% que ha ido creciendo paulatinamente en los últimos veinte años, multiplicándose en un 200%, lo que ha traído como consecuencia, discriminación, rechazo y múltiples abusos por el estado en que se encuentran.
Para obtener una ayuda económica por discapacidad, se requiere de unos requisitos que no sólo exige contar con el certificado de discapacidad, sino consignar ante la institución competente los requerimientos para obtener la ayuda, que varía según el tipo de lesión y edad de la persona.
Todo esto con la finalidad de poder llevar una vida más estable, a pesar de la limitación física o mental existente.
Las instituciones de salud pública, comunitaria o sedes del ayuntamiento, ofrecen la mayor cantidad de información que se necesita para tramitar la ayuda, lo más pertinente es que se consulte la página de los seguros sociales para tal fin.
Entre los principales documentos solicitados están la identificación del discapacitado, el informe médico que certifica la lesión, su historial clínico, así como todos los datos de la persona que estará a cargo del inhabilitado.
Dependiendo del lugar donde el discapacitado se encuentre, tiene la posibilidad de hacerlo ante la propia institución, por medio de una entidad gestora, en su nombre, el de algún familiar o sencillamente a través de la web.
Una vez que se haya hecho la solicitud, se esperará la aprobación de la misma para consignar ante el organismo competente toda la documentación requerida, la cual será evaluada por una junta médica de asistencia social.
Todas las instituciones cuentan con una junta evaluadora de las condiciones, que se basan principalmente en el estado de la discapacidad, su progreso médico, sus condiciones de vida actual, así como su estatus laboral, familiar, legal y social de la persona afectada.
En dicho documento se expresará la evaluación final de la junta médica con respecto a las condiciones de incapacidad de la persona, si la ayuda será otorgada y bajo qué condiciones se hará, en aras de ir evaluando su progreso en caso de mejoría o avance de la discapacidad.
Es importante destacar que para obtener la ayuda correspondiente y lograr el certificado de discapacidad, la misma debe ser superior al 33 %, permitiendo así obtener beneficios de reducción de impuesto sobre la renta, ayudas estudiantiles, de vivienda y vehículo para la persona con discapacidad.
Esta discapacidad certificada también trae como beneficios directos el uso del transporte público a un menor coste, que existan plazas laborales especiales para ellos cuando la lesión es de forma parcial.
Pueden también gozar del beneficio de salud pública de forma gratuita y en las actividades de esparcimiento obtienen grandes descuentos.